Todo mundo quiere ganar dinero online. La cantidad de personas que están moviéndose hacia un entorno totalmente a distancia son muy grandes. Es más, que no lo digo yo, según estudios realizados por Kapersky durante la pandemia, al menos un 45% de las personas prefiere trabajar remotamente por las ventajas que implica, como estar más tiempo con la familia, descansar o ahorrar el dinero del transporte y más ahora en temporada de pandemia (si, aún después de 2 años).
Sin embargo, y dejando a un lado las ventajas del trabajo Home Office, este también tiene un duro impacto en la salud mental. Es normal, ya que somos seres sociales (sí, incluso tú, el que cree ser totalmente asocial), por lo que estar en un espacio cerrado, con pocas salidas, influye duramente en la salud mental.
A continuación, les dejaré algunas estrategias que aplico personalmente para no perder la cordura mientras gano dinero desde la comodidad de casa:
Fija horarios
Uno de los mayores problemas de ser freelance, es tener horarios. Eres “tu propio jefe”, y no tienes nadie que te haga salir de cama temprano, bañarte y levantarte a trabajar. De hecho, si apenas estás iniciando en esto, es probable que me des la razón rotundamente.
Curiosamente, en todos los consejos de productividad y demás, siempre habrá quien te diga que debes fijar un horario, pero es tan difícil.
Personalmente, lo que me funcionó muy bien es fijar horarios basados en la realidad. No es necesario que desarrolles metas irrealistas, sino un poco por debajo de lo regular, para poder cumplir siempre con ellas. Para mí, vale más una meta realista, que una que no cumplas, ya que esto contribuirá con cómo te sientas, haciéndote creer que eres un fracasado, o que lo estás haciendo bien.
El tiempo que inviertas a tu trabajo online depende de ti. Sin embargo, personalmente intento fijar un horario mínimo de 8 horas. De ahí en adelante, los días que me siento motivado, con energía o con una carga de trabajo irregularmente pesada, termino trabajando un poco más.
Pero, ahora probablemente pienses “vale, lo haré”, y este post termine olvidado por ti. El truco es que tomes acción YA. Que configures una alarma, en este mismo momento que me estás leyendo. En mi caso, tengo dos alarmas para levantarme, y un par adicional para determinar el fin de la jornada laboral. Tú puedes ir más allá, e incluso fijar horas de descanso, aunque de eso hablaré más adelante.
Mejora los procesos productivos
¿Ya fijaste tu alarma? ¡Te estoy viendo! Si es así, ahora debemos pasar al segundo punto en la cadena.
Y es que, generalmente, vemos cómo la mayoría de personas van y dicen “Trabaja duro”. ¡Que se j*dan todos ellos!
Personalmente, creo que el trabajo duro no tiene por qué existir. Es decir, siempre debemos esforzarnos más que todos los demás, y tratar de rendir con los mejores resultados. Si antes fijaste una meta, mañana tienes que fijar una más ambiciosa, y nunca quedarte en el pasado. Sin embargo, trabajar duro no significa ganar más dinero.
Lo más importante, es que a la hora de realizar tu trabajo como freelance, intentes optimizar todos los procesos y fases de elaboración de tus tareas. Por lo menos, en mi caso, soy desarrollador, pero esto es aplicable a cualquier labor, sin importar si es online u offline.
El truco es que busques siempre la mejor manera de optimizar determinadas tareas. No es un gran truco. Por ejemplo, hasta 1989 se lanzó Word (Microsoft Office), por lo que hasta antes, tenías que centrarte en gastar mucho más tiempo a la hora de escribir en máquinas de escribir. Actualmente, los programas ofimáticos optimizan mucho el tiempo que toma hacer textos ¡Con lo tedioso -y doloroso- que era escribir en esas máquinas!
Pero ¿Cómo puedo aplicarlo a mi caso? Pues, dependerá personalmente de ti. En mi caso, a la hora de acciones repetitivas creo un bot que haga exactamente lo que necesito diariamente o creo un plugin para WordPress que al final no me estaré centrando en eso que me toma 30 a 60 minutos diarios, a solo 5 minutos para revisar que todo está bien, y así me ahorro algo de tiempo.
Analice personalmente su situación, y busque la manera de hacer mejor y más rápido lo que ya haces. Si vas a sacar cuentas, pero lo haces manualmente, aprende ofimática a través de YouTube, y utiliza un programa como Excel para hacer todo más rápido, o sencillamente si tienes que realizar muchos logos y ediciones al día, procura usar una herramienta para descargar a manera de bulk una serie de contenidos “frecuentes” que necesites. Las posibilidades son infinitas.
Ejercítate
Quizás suene cliché, pero ejercitarse es muy importante si quieres ser freelance. Lo digo en serio. El ejercicio, meditación o cualquier otro método que encuentres para obtener salud mental, es fundamental, ya que como mínimo, liberarás estrés mientras mantienes un peso estable.
No solo vas a mantenerte saludable físicamente, sino mentalmente. Si no eres de hacer ejercicio, seguramente te costará mucho al inicio. El truco es que salgas al menos una vez a la semana en un principio. Fija una alarma (nuevamente), pero hazlo ahora. No dejes para mañana lo que puedes hacer ahora. A esa hora, sal (no importa si es temprano o en la tarde), y puedes empezar dando caminatas de 15 a 30 minutos.
Poco a poco, aumenta la intensidad y los días de ejercicio de 2 a 3 días semanales, y notarás un cambio no únicamente físico, sino mental. Tendrás más energía, y tu creatividad seguirá fluyendo.
Aliméntate correctamente
Durante los primeros años de ser freelance (actualmente tengo unos 3 años o poco más) debo decir que fui bastante torpe en cuanto a fijar una rutina. Ni decirse para alimentarme. Había días donde desayunaba a las 2 PM, o días en los que de plano comía una vez al día. Un desastre.
Como resultados, mis horarios de sueño, energía y enfermedades no faltaban. Es verdad que podía sacar proyectos, sí, pero hoy hago mucho más, y no solo por experiencia, sino también porque tengo la energía suficiente para llevar a cabo este tipo de tareas, con una calidad además bastante decente.
Entiendo que si vives solo es más fácil decirlo que hacerlo, pero hay múltiples estrategias para optimizar el tiempo que gastas en la cocina. Por ejemplo, podrías cocinar carnes y pescados un día antes, y dejarlos en la nevera lista para calentar en microondas o en el fuego. Puedes dividirlo inclusive por raciones, y limitarte a cocinar cada 2 a 3 días los almuerzos, lo que te dejará al menos 2 horas libres en esos días.
Además, evita la comida chatarra. Puede saber muy rica, pero engorda muy fácil. No es necesario que la saques por completo de la dieta si te ejercitas, pero limita las cantidades ingeridas, e intenta reemplazar algunas. Por ejemplo, en mi caso, me ha servido mucho cambiar los snacks por maní y otros frutos secos que son ricos en aceites sanos, y además saben GOD.
Descúbrete
Si me preguntan qué es lo peor que existe, diría que es trabajar en un empleo que no nos gusta. Por eso, ¡Descúbrete! Comprueba qué es lo que te gusta, y busca la manera de ganar algo de dinero con lo que te gusta (en caso de que lo que haces no sea). Por ejemplo, hay personas que olvidan sus dotes de dibujante porque creen que ganan muy poco, y prefieren hacer alguna otra cosa que odian.
El truco es buscar la manera de ganar dinero. Algunas veces puede ser difícil, pero lo que importa es la creatividad. Por ejemplo, si dibujas podrías buscar un público inglés que paga mucho más.
En el peor de los casos, complementa lo que te gusta con lo que trabajas. A veces es difícil, pero otras veces es más fácil de lo que piensas. Por ejemplo, a mí me gusta programar, por lo que trato de enfocarme en proyectos personales más allá de programar para clientes. Invertí en mi inglés apostando a un público inglés y funcionó.
Descansa lo suficiente
Realmente me preocupa la manera en que muchos freelances normalizan trabajar más de 12 horas. Es bastante preocupante, ya que si consideramos las horas de cocina y otras tareas como socializar, estarías durmiendo menos de 8 horas muy probablemente. A punta de café, tenlo por seguro.
Sin embargo, esto no es nada sano. ¡No lo digo yo, lo dice el Gobierno de los Estados Unidos!. Es más, los estudios afirman que dormir mal o dormir muy pocas horas podría causar problemas del riñón, corazón, obesidad, diabetes y hasta accidentes cerebrovasculares.
Está bien que te esfuerces, pero descansa también. Entre 7 y 8 horas es la cantidad regular. Si tienes problemas para conciliar el sueño, para muchos el ASMR y los té relajantes son excelentes.
En mi caso, no sirven. Lo mío es soltar el teléfono desde temprano. Son las 9 y ya tengo que estar soltando el teléfono. También evita las aplicaciones que ocultan la hora durante periodos donde estás próximo a descansar (Juegos, TikTok, etc.)
Cuida tu postura
Tanto los oficinistas como freelance, pasamos muchas horas sentados. Lo chistoso, es que nuestro cuerpo no está fabricado para durar mucho tiempo parados o sentados (vaya dilema), por lo que es importante cuidar la postura durante nuestro horario laboral, a menos que quieras lucir como el hombre de la fotografía a continuación:
Lo primero, es contar con el equipo correcto. No es necesaria una silla gaming, pero sí una silla de escritorio decente con soporte lumbar, acompañado de la costumbre de sentarse correctamente. Algo que puede ser muy difícil al inicio, pero una vez lo vuelves costumbre, es muy fácil. Si tienes dolores en la colmuna, espalda o cuello luego de largas jornadas laborales, puede ser por una mala postura, por lo que se recomienda que te sientes correctamente. Hazlo ahora, por favor. Te lo pongo fácil, te dejo una imagen de la postura correcta en el ordenador
Vigila el total de la postura, pero cuida principalmente que los pies toquen el suelo, que la cabeza se encuentre fija hacia el frente, que los hombros estén descansando, y que tu espalda se soporte en la parte trasera de la silla. Evita los pies enrollados, y las manos sin un soporte.
Tip: Si no tienes dinero, y usas una silla plástica o similar, sin ningún tipo de soporte lumbar, puedes usar un cojín del sofá, o crear tu propio cojín y posicionarlo en el área correcta. Más adelante, prioriza una silla para cuidar la salud de tu espalda.
Ten salidas frecuentes
Por último, pero no menos importante, ¿Recuerdas que te dije que somos seres sociales? Pues, entonces, toca socializar, aunque sea muy poco. No necesitas ir con tu vecina, tocarle la puerta y decirle que si quiere poner la de “La vecinita tiene antojo”. Basta con realizar actividades que fomenten la socialización.
Sé que estamos en pandemia todavía y esto agravó más la situación sin embargo a la medida de lo posible y después de 2 años de confinamiento, busca como socializar más.
Por ejemplo, si en vez de ejercitarte en casa, frecuentas un gimnasio, tienes una probabilidad bastante alta de conversar, aunque sea por 5 minutos con algunas personas de camino al Gym o estando ahí. De la misma manera, puedes acudir a alguna actividad, o simplemente salir por tu cuenta al cine o a algún lugar. Intenta siempre variar, ya que si solo vas a un lugar, terminará volviéndose rutinario.
Y bueno, hasta acá de momento. ¡Recuerden que no todo es dinero!